Tener un sueño reparador es uno de los hábitos más importante que debemos fomentar todos los seres humanos. Si sientes que en este momento tus hábitos de sueño no están siendo saludables, debemos ponerle mucha atención para mejorarlo.
El sueño no solo es fundamental para el cuerpo, también es crucial para la mente. El lapso de tiempo en el que dormimos adecuadamente nos permite recargar energías, descansar de los pensamientos que tuvimos durante el día y tiene un impacto en nuestro estado físico.
Muchas veces el estrés, los malos hábitos alimenticios y las malas prácticas en el día a día no permiten que el momento de dormir sea el adecuado, y las consecuencias de no tener un descanso reparador de manera sostenida y habitual pueden ser devastadoras.
Desde Mishmash comenzamos con un programa en donde la protagonista era la alimentación, y poco a poco con la experiencia con los diferentes grupos de asesoría se transformó para darle valor a cuidar de los demás hábitos que tenemos como seres humanos. Sin duda el hábito del sueño es uno de los temas más desafiantes a tratar con todos nuestros alumnos.
Establece una rutina para que tu cuerpo se acostumbre a la hora de dormir y la hora de despertar, manteniendo una cantidad de horas adecuadas entre cada uno.
Esta temperatura ambiental es ideal, teniendo en cuenta la temperatura corporal que se obtiene al dormir.
La luz puede interrumpir el ciclo del sueño, evitando que descanses.
La luz emitida por los dispositivos móviles mantiene el cerebro activo.
Esto puede crear el efecto contrario y mantenerte alerta, impidiéndote conciliar el sueño.
Es importante que el cuerpo se prepare para descansar. Meditar, leer, agradecer o escribir pueden ser actividades que te ayuden a sentirte tranquila(o) antes de descansar.
Repetir y cumplir estos pasos puede no ser muy fácil la primera vez. Adoptar una nueva rutina toma tiempo, disciplina y voluntad, pero nada es imposible. Ir paso a paso y a tu ritmo, te permitirá acostumbrarte a adoptar estos hábitos positivos para que puedas tener un sueño reparador que le beneficie a tu cuerpo y tu mente.
Pronto notarás cómo tienes más energía, una actitud más positiva, tu piel incluso se verá más luminosa y tu organismo irá teniendo un mejor funcionamiento.
Recuerda que para lograr un cambio, debemos primero ser conscientes de los errores que estamos cometiendo. Así que analiza estos puntos y mira cuál o cuáles son prioritarios para que empiecen a modificarlos.
Si no sabes por dónde comenzar, inscríbete aquí a nuestro programa en donde te ayudaremos y acompañaremos a descubrir nuevos hábitos que te llevarán a cumplir esos objetivos que te has propuesto por años.